«Om mani padme hum» repiten hasta la saciedad miles de tibetanos en sus incansables vueltas al Templo de Jokhang , el más famoso de los templos budistas de Lhasa en el Tíbet, el centro espiritual de la ciudad.
Es la zona conocida como Barkor, el verdadero corazón de la ciudad.
Mientras rezan sus mantras no dejan de dar vueltas a sus molinos de oración , siempre en el sentido de las agujas del reloj.
Monjes tibetanos cantado mantras
Los hay de todos tipos y tamaños, desde algunos que caben en la palma de la mano hasta algunos enormes que se encuentran en monasterios y hasta los hay movidos por sistema eléctrico o por la agua de lo ríos.
Este modelo es quizás el mas conocido, como podéis ver lleva en su interior llevan unos pergaminos con mantras escritos a mano, normalmente en su antiguo lengua, el sánscrito, pergaminos que pueden llegar tener de diez a doce metros de longitud perfectamente enrollados en su interior y que con el movimiento elevan al cielo sus oraciones y plegarias.
Tuve la suerte de poder compartir con esta gente unas cuantas vueltas al Barkor una mañana antes de que amaneciese, el ambiente era sobrecogedor, cientos de peregrinos recitando sus mantras entre el humo de los inciensos y su fuerte olor hacia del momento algo casi mágico.
Este molino en concreto se lo compre directamente a un peregrino, eso si, después de que terminara con sus oraciones.
La imagen inferior junto al molino esta el tradicional khata, pañuelo ancho o chal de pregaria tibetano, tradicionalmente impuesto por un lama cuando los devotos o peregrinos se reúnen en su presencia.
hola me gustaria bolver aprender o mas bien recordar con detalles sobre los monges tibetanos ya que en mi anterior vida fui un monge del tibet y en esta vida traigo recuerdo de mi anterior vida y lo practico, me llamo rosa martha sanchez hernandez.